En este vídeo podréis ver lo que sucede en la Comunidad Valenciana desde hace mucho tiempo. Este vídeo muestra una entrevista de Jordi Évole, programa Salvados de la Sexta, a gente que vivió de primera mano el fatídico accidente de metro de la Linea 1 en Valencia, donde murieron 43 personas.
El 3 de julio de 2006 hacia las 13:00 horas tuvo lugar en la Línea 1 de metro de Valencia el mayor accidente de metro de España, tercero de Europa y cuarto a nivel mundial. 47 personas heridas y otras 43 fallecidas. Y todo era silencio.
Alguna persona se podrá preguntar ¿Qué causó el accidente? ¿Quién se responsabiliza? ¿Alguien ha dado alguna explicación?
Como en todo pasa, en la vida no tomamos precauciones hasta que sucede una desgracia, pues aquí sucedió algo parecido, todo a punta a la no señalización de los puntos negros de las líneas de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana, a parte de la inexistencia de unas balizas que hubiesen podido evitar la tragedia. Ahora bien, ahí no se queda la cosa, cuando en la entrevista, Jordi Évole, habla con Jorge Álvarez, maquinista del Metro de Valencia, podemos ver que este dice "Creo que hubo negligencias al no tomar medidas para proteger los puntos de la vía que eran necesarios", añade, sorprendiéndose además porque "los cristales saltaron y se rompieron", algo que "no es normal". "El accidente no habría soportado tantos muertos si la fijación de los cristales hubiese aguantado", apunta.
Ya sabemos qué causó el accidente: Negligencias en la gestión de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana.
Continuando con la siguiente pregunta, es lamentable que la Generalitat Valenciana no haya asumido ninguna responsabilidad, es más, atribuyó toda la responsabilidad al maquinista del metro que falleció en el instante. Como afirma Vicent Peris, director de un documental sobre el accidente, "El Papa llegaba cinco días después a Valencia. Se explicó oficialmente que el maquinista llevaba exceso de velocidad, el tren se salió y volcó. Se le atribuyó a él toda la responsabilidad, aunque no sobrevivió. Posteriormente no hubo juicio. La juez encargó un informe a un perito y sólo se le tomó declaración a él con una sola pregunta sobre si el tren habría volcado en esa curva con exceso de velocidad".
Responsabilidades: Generalitat Valenciana y Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana.
Y con la última pregunta, responderemos que no, nadie ha querido dar explicaciones y las únicas explicaciones que se dieron fueron manipuladas, premeditadas con nocturnidad y alevosía... Actuaciones de la mayor mafia que pueda existir, eso es lo que la Generalitat Valenciana, gobernada por el PP, estaba haciendo.
El Diputado Socialista, Andrés Perelló, comenta en la entrevista que "Recibí una llamada que me dijo que siguiera adelante con la investigación, que lo que estaba ocurriendo estaba siendo preparado", agrega, confirmando que se dieron consignas para "salvar a la empresa y que todo quedara como un lamentable accidente". "Se creó una verdad artificial que suplantó a la auténtica verdad". Si estas declaraciones con fuertes, más lo son las que realiza Arturo Rocher, exjefe de seguridad de la empresa encargada de la misma en el Metro de Valencia, cuando en la entrevista afirma que "el que contestaba 'mal' [lo contrario de lo deseado] se llevaba una bronca impresionante". "Se ensayó hasta el tono utilizado, o las palabras tabú, como 'tragedia', 'deficiencia' o 'baliza'", añade, considerando que "la presión a la que se nos sometía era enorme: o estabas dentro, o no estabas". Además, por si esto no es fuete, afirma que "tras la investigación se llegó a hacer una comida de celebración entre todos los que habíamos comparecido, con un menú abundante, con abundante vino y anécdotas de las comparecencias, riéndose de lo que se había dicho", y concluye diciendo que "durante unos años fue un plan perfecto, lo que pasa es que el plan perfecto no existe".
Como decía antes, la actuación del Gobierno de la Generalitat Valenciana de Paco Camps era más propio de una mafia que de un equipo de gobierno. Pero ahí no termina la cosa. Los responsables de la Generalitat Valenciana tuvieron que dar alguna explicación a los familiares de las víctimas y esto fue lo que hicieron, según Bea Garrote y Enric Chulio, dirigentes de la asociación de víctimas del accidente del Metro de Valencia:
"a algunos afectados se les ofrecieron cosas: trabajo o compensaciones", si bien consideran que estas "no fueron públicas y estuvieron ligadas a si dichas víctimas se personaban o no en la investigación".
"Fue un comportamiento más propio de la mafia que de un Gobierno. Hubo personas coaccionadas, gente que nos dijo que no tenía la libertad, por ejemplo, para pertenecer a la asociación".
"Hubo casos de personas heridas en el hospital, que no sabían si iban a sobrevivir, y cuyas familias se veían obligadas a evaluar la situación y decidir en pocos días si aceptar cierta indemnización".
Estas últimas declaraciones me producen la más asquerosa repugnancia hacia un Gobierno y un partido democrático como el PP, que ha permitido a los suyos actuar de la más sucia de las maneras. Creo que deberían retomar el caso y a esta GENTUZA ponerla en su sitio, que es fuera de la Generalitat y en la cárcel. Que asuman las responsabilidades que no asumieron en su momento. Esto ya no se paga con dinero, sino con responsabilidades políticas.
La Asociación de Víctimas del accidente de Metro Valencia, se concentran todos los 3 de cada mes en la Plaza de la Mare de Deu de Valencia para hacer ver a la sociedad que esto no ha caído en el olvido, que aún queda algo de esperanza y para exigir responsabilidades.
Andoni León
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