lunes, 26 de julio de 2021

Día de los abuelos

 


¡¡Cuánto les debemos a nuestros abuelos y abuelas!!

¡¡Cuánto nos acordamos de ellos  y ellas!!

Gran parte de lo que hoy somos y cómo somos, se lo debemos a nuestros abuelos y abuelas.

Con ellos nos hemos criado, nos han malcriado, nos han consentido y educado. Han estado ahí con nosotros cuando nuestros padres, por motivos laborales, no han podido estar con nosotros.

Nos han dado el desayuno, el almuerzo, la comida, la merienda y la cena. Nos han llevado a la “guardería”, al colegio y al parque. Con ellos hemos jugado, reído y llorado.

Por desgracia, solo me queda un abuelo con vida, mi abuelo Vicente, con 90 años.

De todos guardo bonitos recuerdos de momentos que nunca olvidaré. Y que hoy quiero compartir alguno con vosotros, aunque me toque llorar y también se me escape alguna sonrisa al recordar algunos momentos...

Mi pasión por la naturaleza me la inculcaron mis abuelos. Ambos tenían sus huertas. Me llevaban muchas tardes y algún que otro sábado por la mañana. Me enseñaban cómo se cultivaba, la importancia del agua, cómo y cuándo recolectar y el respeto al medio ambiente. Qué bonito era recoger la cosecha y llevarla a casa. La huerta de “el Candilico” de mi abuelo Pepe, la del “barranco Chiva” o “el Remolino” de mi abuelo Vicente. Cultivaban patatas, cebollas, tomates, pimientos, berenjenas, “bajoqueta”…  Cosechaban para casa y siempre queda para la familia, amigos y vecinos.

Cómo no recordar el arte y la mano de mis abuelas, Andrea y Nati, para transformar estas hortalizas en las mejores comidas que jamás he probado. Cada una en su estilo, pues mi abuela Nati era vasca y, mi abuela Andrea andaluza. Y cómo me malcriaban… Recuerdo que mi madre las reñía porque me hacían siempre patatas fritas. Y un día mi abuela Andrea le contestó a mi madre “con lo que yo he pasado en esta vida para comer porque no teníamos ni comida ni dinero… Y ahora que no nos falta, que no quieras que le dé tanto de comer al crío…”. Yo era feliz con patatas fritas y un trozo de carne. Pero todo lo que cocinaran me gustaba más.

Mi abuelo Pepe era carpintero, me intentaba enseñar el oficio, pero no lo consiguió. Recuerdo lo que disfrutaba él viendo cómo dábamos forma a las fallas cuando empezamos. Siempre metía mano y nos aconsejaba.

Y con esto de las fallas, fue mi abuela Andrea quien me enseñó a hacer los buñuelos. Y lo mío que me costó, porque ella era zurda y yo diestro. Y no me aclaraba. Pero le cogí la marcha.

Recuerdo esas tardes en casa de mi abuela Nati jugábamos a las cartas, al parchís, al dominó, al bingo (ahí mi abuelo se apuntaba). Siempre me dejaban ganar (menos al bingo). Aunque siempre me iba a la cama con 100 pesetas. Las cuales guardaba muy bien hasta tener un dinero ahorrado que invertía en hacer regalos a mis abuelos y mis padres.

A mi abuelo Vicente le encantaba ver que en el colegio y los estudios me iba bien. Y me decía “galán, estudia derecho para algún día trabajar sentado”. Siempre me decía que el trabajo en el campo era muy duro y que daba poco a ganar. Razón no le faltaba. Hoy, a sus 90 años y una memoria prodigiosa aún me lo dice. Pero lo que más me gustaba era ir al “Cerro Mojón” a sus casetas de madera, su balsica de agua para los animales, beber agua fresca del pocico y correr entre sus olivos y algarrobos. También tenía su viña y sus higueras.

Siempre digo que los abuelos deberían ser ETERNOS. Pero mientras nos acordemos de ellos y no caigan en el olvido, nunca morirán. Porque siempre es un orgullo acordarse de ellos. Y siempre les estaremos agradecidos por todo lo que han hecho por nosotros y por todo lo que nos han enseñado. Soy lo que soy y cómo soy gracias a ellos.






viernes, 9 de julio de 2021

Vacunación, responsabilidad y prudencia.

 


Es difícil no recordar aquel 13 de marzo de 2020 en el que el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciaba la declaración de estado de alarma.

Algo sucedía, algo malo estaba llegando… Y no, no lo veíamos. Un enemigo mortal e invisible. Un enemigo que, a día de hoy, sigue arrebatando la vida a mucha gente. COVID-19 o coronavirus. Así lo llamamos.

En poco tiempo miles de contagios, hospitales colapsados, UCIs llenas, numerosos fallecimientos… Y todas y todos teniendo que guardar un aislamiento preventivo en nuestras casas ¿Quién nos lo iba a decir?

Cambiamos nuestros hábitos, nos amoldamos a realizar actividades dentro de casa, salíamos a los balcones a aplaudir al personal sanitario , realizábamos videollamadas para ver y hablar con familiares y amigos… Y teníamos un nuevo complemento: la mascarilla.

Llegó la desescadala.  Poco a poco nos dejaban salir a la calle de forma ordenada. Volvíamos a tener contacto con personas respetando la distancia de seguridad y demás restricciones… Parecía que todo esto pronto llegaría a su fin.

Aún así hemos visto cómo familiares y amigos se contagiaban. Cómo en alguna que otra ocasión nos ha tocado guardar cuarentena por posibles contagios tras hacernos una PCR… Pero nada sucedía como al principio. Aún así, había que actuar con respeto y prudencia.

El 27 de diciembre de 2020 pusieron a Araceli la primera dosis de la vacuna contra la COVID-19 en España. A partir de este momento, comenzaba la vacunación en nuestro país.

Ayer, 8 de julio de 2021 me tocó a mí la primera pauta de PFIZER. En el Centro Médico de Pedralba. Desde estas líneas quiero agradecer al personal sanitario por la buena organización y predisposición, así como a la Policía Local de Pedralba por su colaboración. El 29 de este mismo mes, estoy llamado a la segunda dosis para completar la pauta.

En España se han entregado 51.314.332 dosis. De las cuales se han administrado 45.924.484 dosis (89’5%). Tenemos en España 27.277.127 personas con una dosis inoculada (57’5% de la población). Y 20.528.505 personas con la pauta completa (43’3% de la población). En la Comunidad Valenciana son 2 millones de personas con la pauta completa (45%). Además, se va a adelantar la vacunación de las personas de entre 20 y 29 años. Y, se prevé que para septiembre se comience la vacunación en personas menores de 19 años.

La vacunación funciona. Y, pese a todo, va a buen ritmo.

Con todo ello, los contagios han vuelto a subir. Debemos ser un poco más pacientes. Toca seguir siendo responsables. Pues esto no ha terminado por desgracia. Estamos en el final, y toca hacer un esfuerzo colectivo. Así pronto podremos recobrar la tan ansiada normalidad completa.

jueves, 8 de julio de 2021

Los socialistas de La Serranía y Rincón de Ademuz celebran su Comité Comarcal en Aras de los Olmos

                      


El pasado sábado militantes socialistas de La Serranía y Rincón de Ademuz nos dimos cita en la localidad de Aras de los Olmos para celebrar nuestro comité comarcal.

Tras bastante tiempo sin poder juntarnos debido a la situación de pandemia, ya habían ganas de volver a la presencialidad, aunque con todas las medidas por el covid correspondientes. 

Fue un comité comarcal sencillo y cercano, en el que se dió voz a todas y todos los militantes asistentes. 

Al inicio de la reunión, el alcalde de Aras de los Olmos, Rafael Giménez, dio la bienvenida a los presentes y mostrado su alegría por “volver a encontrarnos todos y haber elegido Aras de los Olmos para este encuentro”. Además el socialista Giménez, puso en valor la importancia del medio rural y ha reseñado el trabajo que se está haciendo en su ayuntamiento.

A dicho encuentro también asistió la Senadora y miembro de la dirección provincial del PSPV-PSOE, Mercedes Berenguer, la cual resaltó “el gran trabajo que se está haciendo desde el Gobierno, el Consell y la Diputación en esta pandemia”. Además, lamentó “la burda oposición que está llevando a cabo el PP en estos momentos sin arrimar el hombro y siendo desleal a España”. Berenguer transmitió su compromiso y el de la dirección provincial con el mundo rural para combatir la despoblación.

Seguidamente, intervino el Secretario General de los socialistas de La Serranía y el Rincón de Ademuz, Ramiro Rivera, quien en primer lugar quiso tener unas palabras de agradecimiento a alcaldes, alcaldesas y concejales “por su incansable trabajo durante la pandemia para ayudar en todo a las y los vecinos de nuestros municipios”. Rivera, como diputado provincial, destacó la labor que se está llevando a cabo desde la Diputación de Valencia “haciendo un gran esfuerzo inversor en todos los municipios con el Plan de Inversiones, el Fondo de Cooperación o el Fondo de Despoblación”. Finalizó su intervención haciendo un llamamiento a la militancia animándola para “poco a poco recuperar la presencialidad y volver a poner en marcha los motores de todas las agrupaciones locales de cara a esta segunda mitad de la legislatura y poniendo el objetivo en las elecciones municipales del 2023”.

Finalmente, se abrió un turno de palabra en el que han intervenido las y los representantes socialistas de cada municipio de La Serranía y Rincón de Ademuz tratando problemas y necesidades de cada municipio y de las comarcas.

En representación de la agrupación socialista de Pedralba asistimos Silvia Calvet, como Secretaria General, Fina Herrero, como miembro de la dirección local, y un servidor, como miembro de la dirección comarcal. 

La Secretaria General del PSOE de Pedralba, Silvia Calvet, señaló «la importancia de la unión de todos los municipios de la comarca para defender en todas las instituciones los problemas y necesidad comunes que tenemos como comarca, así como también los proyectos municipales por los que trabajamos». Calvet afirmó que «el PSOE de Pedralba cree en el proyecto comarcal y participaremos de forma activa».

Así nos emplazamos a septiembre donde los socialistas trabajarán en varias jornadas sobre unas líneas programáticas locales y comarcales.